José Ignacio Leonardo Camargo, insurgente de Chamacuero
Especialista en Estudios Regionales
La historia de México tiene un sin fin de personajes de primera importancia, que yacen en el olvido, uno de ellos es el chamacuerense, José Ignacio Leonardo Camargo, que se unió al Ejército Insurgente liderado por Miguel Hidalgo.
Ignacio Camargo como es conocido generalmente, nació el 7 de noviembre de 1783 en Chamacuero, Guanajuato como consta en la partida de bautizo. Sus papás fueron Mariano Camargo y Juana Iriarte. Mariano tenía a una hermana que se llamaba María Josefa Camargo, que se casó con Antonio Roxas Taboada quienes tendrían
a Manuela Taboada y al que sería también insurgente Pedro Taboada. Es decir, Manuela y Pedro era primos de Ignacio Camargo.
Ignacio entró al Ejército Realista, por lo que conoció a Ignacio Allende y a su primo político Mariano Abasolo que se casó en 1805 con Manuela Taboada.
Camargo estaba al frente del regimiento realista de Celaya, pero él ya comulgaba con las ideas independentistas, por lo que decidió unirse a las fuerzas insurgentes de Miguel Hidalgo. Participó en las principales batallas de la primera etapa de la lucha por la independencia y llegó a ser mariscal.
En Guadalajara, Hidalgo pudo instalar un gobierno provisional,
pero al perder el ejercito insurgente la batalla del Puente de Calderón tuvieron que marchar retirada rumbo al norte, su idea era llegar a Estados Unidos.
En el camino fueron traicionados por Ignacio Elizondo y aprehendidos en Acatitán de Baján. Cuando iban a capturar a Ignacio Allende su hijo Indalecio y Joaquín Arias, lo trataron de impedir, sin embargo, Elizondo fue más hábil y mató a Indalecio e hirió a Arias.
Camargo fue fusilado junto con su primo Pedro Taboada el 10 de mayo de 1811, en Chihuahua.
Mientras que las cabezas de los principales líderes: Hidalgo, Allende, Jiménez y Aldama fueron colgadas en la Alhóndiga de Granaditas y después sus restos se trasladarían al Ángel de la Independencia.
Los demás insurgentes asesinados en Chihuahua, fueron enterrados en el panteón San Felipe. Entre ellos estarían el medio hermano del cura Hidalgo, Mariano Hidalgo, Francisco Lanzagorta, Onofre Portugal, José María Chico, Agustín Marroquín, Juan Bautista Carrasco nacido en Acámbaro; Ramón Garcés, Luis G. Mireles, Ventura Ramón, Manuel Santamaría, José Plácido Morrión, Nicolás Zapata, José Santos Villa, Trinidad Pérez, Vicente Valencia, José Solís. Como un acto de justicia sería importante que fueran nombrados beneméritos.
Sin embargo, se perdio la huella de ellos, al convertirse el panteón en la quinta Touché y el jardín 25 de Marzo hoy Abraham González que se ubica en las calle de Bolívar e Independencia. Al perderse su ubicación se les considera como los insurgentes perdidos.
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